Copa Oro 2015: duelo de dos frentes

Ciudad de México

Este martes inicia la edición número 13 de la Copa Oro, desde que el torneo que organiza la Concacaf cambió su formato y su nombre en 1991; ha sido una competencia distinguida por la permanente presencia del combinado de las barras y las estrellas, el equipo local, que ha llegado en nueve ocasiones hasta la final, mientras que la selección mexicana lo ha conseguido apenas seis veces. Es una justa que estos dos escuadrones dominan ampliamente.

El mote de Gigante se los diputan siempre ellos dos. Ahora, la final les aguarda a ambos una vez más. Pese a que los reflectores ya tienen dueños, aunada a la presión para levantar la Copa a finales de julio, hay un par de selecciones que también podrían sumarse a la palestra por cosechar el éxito deseado; Costa Rica y Honduras, desde su trinchera, darán pelea, a su modo, con sus limitantes, siempre con el cuchillo entre los dientes, sin nada que perder.

REVANCHA TRICOLOR

México llega a la Copa Oro con la obligación de ser campeón, sea contra quien sea que le toque enfrentarse. Los dirigidos por Miguel Herrera, con todo y las bajas por lesión de Javier Hernández y Héctor Moreno, cuentan con arsenal suficiente y materia prima para encarar el torneo de mayor relevancia en la Concacaf. La afición tricolor, los altos mandos del balompié azteca y su historia, así se los demandan.

Como estandarte principal y posible artífice de la obra, la legión nacional tendrá a Carlos Vela, que vuelve a participar en un torneo oficial con el Tri; el enigmático ariete de la Real Sociedad ha preferido guardar silencio con la prensa desde su retorno al combinado, a finales del año pasado y luego de perderse la oportunidad de jugar el Mundial de Brasil 2014, pero en su mente está el título del certamen en puerta.

Para fortalecer el ataque y hacer mancuerna con Vela Garrido, su socio de siempre, Giovani dos Santos, también estará en el campo; Héctor Herrera, Jesús Tecatito Corona y Andrés Guardado integran las fi las de este equipo: “es una obligación salir campeones de nuestra área”, ha advertido en reiteradas ocasiones Miguel Herrera, timonel mexicano.

¿EL NUEVO GIGANTE?

La eliminación de México en octavos de final en el Mundial del 2002, la voltereta contra el Tri en la final de la Copa Oro del 2007, el subcampeonato en la Copa Confederaciones 2009 y el pasado título de la justa en 2013, son argumentos más que suficientes para pensar que Estados Unidos podría ser el nuevo gobernador de la Concacaf y eso lo tratarán de plasmar en la contienda en la que debutarán contra Honduras este 7 de julio.

Les pertenece la afición local, que los apoyará incondicionalmente. El cuadro que dirige Jürgen Klinsmann intentará ganar el torneo y así conseguir el medio boleto que les hace falta para asistir a la Copa Confederaciones del 2017.

Tendrán una base de jugadores experimentados, combinados con algunos elementos jóvenes, como son el arquero William Yarbrough y el zaguero Ventura Alvarado que actúan en la Liga MX.

El mismo entrenador alemán explicó en la página de US Soccer cómo será el 2015 en el torneo que organiza Concacaf: “es un año de transición.

Es la oportunidad de ver a los jugadores frescos, a los jugadores más jóvenes. Hoy en día se trata de obtener resultados. Tenemos que ir a la Copa de Oro para ganarla. Es un mensaje simple”. Y para ganar el torneo de la zona, el peso del equipo recaerá en buena parte en el mediocampista Michael Bradley. El integrante del Toronto FC es el encargado de mover los hilos del mediocampo. Es un contención que cumple con funciones de recuperación, marca y que se integra al ataque; el casaca ‘4’ también aporta una dosis de experiencia, debido a que brilló en el futbol europeo con el Chievo Verona y un par de temporadas con la Roma.

El cuadro de las barras y las estrellas tratará de respaldar a Bradley con una mezcla de futbolistas que militan en Europa, donde resalta el arquero Brad Guzan, del Aston Villa, el zaguero Fabian Johnson del Borussia Mönchengladbach, el volante DeAndre Yedlin del Tottenham Hotspur y el artillero Aron Johannsson del Az Alkmaar; también fue citado el siempre incisivo Clint Dempsey del Seattle Sounders, quien tiene trecho recorrido en el futbol del Viejo Continente.

CONFIRMACIÓN TICA

Después de sorprender al mundo con una actuación brillante en la pasada Copa del Mundo, donde llegaron hasta los cuartos de final, Costa Rica se ha trazado metas altas en este verano. La selección que comanda Paulo César Wanchope desea seguir a la alza y llega a la Copa Oro con dicha encomienda, sin importar los favoritos de siempre.

“Estamos enfocados en sacar esto adelante; queremos ir paso a paso, pero nos ponemos objetivos importantes en la cabeza”, señaló hace unos días el estratega tico, que, como referencia de ataque tendrá al implacable Joel Campbell, un delantero fornido, forjado en Europa desde muy joven, aunque aún sigue siéndolo (23 años).

La plantilla de Wanchope, más modesta que la mexicana o la estadunidense, no es un cuadro que deba menospreciarse; este plantel solo resentirá la baja de Keylor Navas, su arquero titular, lesionado desde hace unas semanas.

“El grupo está fuerte, sabemos lo que hay que hacer”, señaló Bryan Ruiz, el gran motor del seleccionado. Están listos para dar el siguiente paso.

POR LA SORPRESA

Los tiempos de Carlos Pavón y Amado Guevara quedaron atrás. Tampoco está Carlo Costly o el eterno Noel Valladares. Ahora, la selección hondureña acude con un cuadro renovado y, que en su mayoría actúa en la liga local, a la Copa Oro en busca de darle la vuelta a lo que fue su participación en la Copa del Mundo del 2014 y, de paso, quitarle protagonismo al duopolio México-Estados Unidos y así opacar a la selección costarricense que brilló en Brasil 2014.

El entrenador Jorge Luis Pinto tratará de emular su trabajo con los ticos y para que ello se pueda dar dependerá del orden defensivo que dé el lateral Maynor Figueroa, quien actuaba hasta el año pasado en el Hull City. Es el capitán y emblema.